"Los derechos humanos son irrenunciables y progresivos, son conquistas de las que no se puede volver atrás", afirmó el Defensor del Pueblo de la provincia de Buenos Aires, Carlos Bonicatto, al considerar que son "una construcción que no se debe leer desde la coyuntura política". En esa línea, planteó que "es un absurdo que se pongan en juicio
"Los derechos humanos son irrenunciables y progresivos, son conquistas de las que no se puede volver atrás", afirmó el Defensor del Pueblo de la provincia de Buenos Aires, Carlos Bonicatto, al considerar que son "una construcción que no se debe leer desde la coyuntura política".
En esa línea, planteó que "es un absurdo que se pongan en juicio los derechos humanos", ya que constituyen un "piso ético inherente a todos los seres humanos", que se deben entender como "una lucha de todo el pueblo" dentro de una "idea de democracia como construcción colectiva".
Los dichos de Defensor del Pueblo tuvieron lugar durante la jornada "Los medicamentos y la gente, la prescripción por nombre genérico y su impacto social. A 25 años de su implementación en la provincia de Buenos Aires", organizada por el Ministerio de Salud provincial y que tuvo lugar en la Casa de Gobierno bonaerense.
Durante el encuentro, Bonicatto consideró que el de los medicamentos es "un tema vertebral en el funcionamiento del Estado, que debe ser cubierto desde múltiples miradas y que, en el caso de la Defensoría, se sigue con una visión amplia".
"La Defensoría del Pueblo es una institución de garantías, tiene que asegurar que una persona pueda ejercer sus derechos", sostuvo al integrar un panel que giró en torno a la visión de los actores en el impacto social de los medicamentos genéricos. "No podremos construir una política de salud igualitaria sin una fortaleza del Estado frente a los poderes económicos", indicó.
"Estamos atravesando una visión distinta del Estado, el cual ahora tiene que estar en la calle para responder a las nuevas forma de reclamar de la gente", concluyó el Defensor.
En esa línea, planteó que "es un absurdo que se pongan en juicio los derechos humanos", ya que constituyen un "piso ético inherente a todos los seres humanos", que se deben entender como "una lucha de todo el pueblo" dentro de una "idea de democracia como construcción colectiva".
Los dichos de Defensor del Pueblo tuvieron lugar durante la jornada "Los medicamentos y la gente, la prescripción por nombre genérico y su impacto social. A 25 años de su implementación en la provincia de Buenos Aires", organizada por el Ministerio de Salud provincial y que tuvo lugar en la Casa de Gobierno bonaerense.
Durante el encuentro, Bonicatto consideró que el de los medicamentos es "un tema vertebral en el funcionamiento del Estado, que debe ser cubierto desde múltiples miradas y que, en el caso de la Defensoría, se sigue con una visión amplia".
"La Defensoría del Pueblo es una institución de garantías, tiene que asegurar que una persona pueda ejercer sus derechos", sostuvo al integrar un panel que giró en torno a la visión de los actores en el impacto social de los medicamentos genéricos. "No podremos construir una política de salud igualitaria sin una fortaleza del Estado frente a los poderes económicos", indicó.
"Estamos atravesando una visión distinta del Estado, el cual ahora tiene que estar en la calle para responder a las nuevas forma de reclamar de la gente", concluyó el Defensor.