Un acuerdo que apunta a definir los lineamientos para un correcto uso de las instalaciones del Teatro Argentino de La Plata y la protección de su valor como patrimonio histórico, firmó el Defensor del Pueblo de la provincia de Buenos Aires, Carlos Bonicatto, junto a autoridades e instituciones provinciales. Este compromiso tiene que ver
Un acuerdo que apunta a definir los lineamientos para un correcto uso de las instalaciones del Teatro Argentino de La Plata y la protección de su valor como patrimonio histórico, firmó el Defensor del Pueblo de la provincia de Buenos Aires, Carlos Bonicatto, junto a autoridades e instituciones provinciales.
Este compromiso tiene que ver con las denuncias que acercaron a la Defensoría del Pueblo un grupo de vecinos que cuestionaban la decisión del Estado bonaerense de equipar con oficinas para la Justicia Electoral la plaza seca del Teatro Argentino durante el año pasado, lo que afectaría el patrimonio urbanístico y arquitectónico de La Plata, protegido por la constitución de la Provincia.
Además del Defensor bonaerense, el convenio que apunta a “generar una participación activa y coordinada en el marco del consenso”, fue adherido por el presidente del Instituto Cultural de la Provincia de Buenos Aires, Juan Carlos D’Amico; el administrador general del Teatro Argentino, Leandro Manuel Iglesia; y los miembros del Colegio de Arquitectos de la provincia de Buenos Aires Distrito I, Alberto Sbarra, Silvia Anahí Portiansky y María Pizzi.
Bonicatto, que supervisará el cumplimiento de lo todo lo asumido por las partes, destacó la forma en que se logró el acuerdo y sostuvo que “la actualidad nos impone otro tipo de abordaje a los conflictos, y creo que los métodos de resolución alternativa de éstos, como la mediación, mejorarán la justicia”.
“Hemos tenido otras situaciones en las que el desarrollo y el medio ambiente generan discusiones en cuanto a la defensa de los derechos. Resolverlos con creatividad tiene que ver con nuestro objetivo, que es el de ser una institución útil y creíble”, apuntó el Defensor provincial.
Por su parte, Juan Carlos D’amico, reconoció su satisfacción por encontrar en la Defensoría “una institución no burocrática, ágil, y haber podido trabajar conjuntamente en base a distintas miradas y diferentes posibles soluciones”.
En tanto, el presidente del Colegio de Arquitecto, Alberto Sbarra, afirmó que “el espacio público cumple un rol importante: hacer las ciudades más habitables disminuye la conflictividad social. En este sentido, es importante articular las distintas posiciones para encontrar soluciones que beneficien a la vida en democracia”.
Este compromiso tiene que ver con las denuncias que acercaron a la Defensoría del Pueblo un grupo de vecinos que cuestionaban la decisión del Estado bonaerense de equipar con oficinas para la Justicia Electoral la plaza seca del Teatro Argentino durante el año pasado, lo que afectaría el patrimonio urbanístico y arquitectónico de La Plata, protegido por la constitución de la Provincia.
Además del Defensor bonaerense, el convenio que apunta a “generar una participación activa y coordinada en el marco del consenso”, fue adherido por el presidente del Instituto Cultural de la Provincia de Buenos Aires, Juan Carlos D’Amico; el administrador general del Teatro Argentino, Leandro Manuel Iglesia; y los miembros del Colegio de Arquitectos de la provincia de Buenos Aires Distrito I, Alberto Sbarra, Silvia Anahí Portiansky y María Pizzi.
Bonicatto, que supervisará el cumplimiento de lo todo lo asumido por las partes, destacó la forma en que se logró el acuerdo y sostuvo que “la actualidad nos impone otro tipo de abordaje a los conflictos, y creo que los métodos de resolución alternativa de éstos, como la mediación, mejorarán la justicia”.
“Hemos tenido otras situaciones en las que el desarrollo y el medio ambiente generan discusiones en cuanto a la defensa de los derechos. Resolverlos con creatividad tiene que ver con nuestro objetivo, que es el de ser una institución útil y creíble”, apuntó el Defensor provincial.
Por su parte, Juan Carlos D’amico, reconoció su satisfacción por encontrar en la Defensoría “una institución no burocrática, ágil, y haber podido trabajar conjuntamente en base a distintas miradas y diferentes posibles soluciones”.
En tanto, el presidente del Colegio de Arquitecto, Alberto Sbarra, afirmó que “el espacio público cumple un rol importante: hacer las ciudades más habitables disminuye la conflictividad social. En este sentido, es importante articular las distintas posiciones para encontrar soluciones que beneficien a la vida en democracia”.