Con la intención de dar respuesta al cupo que la Provincia exige a los organismos estatales, la Defensoría del Pueblo bonaerense sumó a tres trabajadores trans a su planta de personal
Con la intención de dar respuesta al cupo que la Provincia exige a los organismos estatales, la Defensoría del Pueblo bonaerense sumó a tres trabajadores trans a su planta de personal, por lo que de esta forma el organismo que conduce Guido Lorenzino pasa a cumplir con el mínimo establecido por la ley.
Con la llegada de Aidan Logan Víctor Barrientos Matelica, Julieta Micaela Quintana y Nicole Daniela González, quienes se suman a Andrea Maíz, la Defensoría da respuesta a la exigencia del uno por ciento de la totalidad de que su personal esté ocupado por personas travestis, transexuales y transgénero que reúnan las condiciones de idoneidad para el cargo, tal como detalla la norma.
“No sólo cumplimos con el piso que prevé la ley, sino que también proyectamos la incorporación de más trabajadores para seguir en una senda de inclusión, ya que la igualdad laboral es un derecho que decidimos hacer valer como prioritario”, aseguró Lorenzino.
En esa línea, el Defensor del Pueblo destacó la necesidad de que “exista un cambio cultural, para que en los distintos ámbitos estas personas sigan ganando reivindicaciones, las cuales estuvieron, y lamentablemente aun lo siguen estando, postergadas en muchos aspectos”.
Con la llegada de Aidan Logan Víctor Barrientos Matelica, Julieta Micaela Quintana y Nicole Daniela González, quienes se suman a Andrea Maíz, la Defensoría da respuesta a la exigencia del uno por ciento de la totalidad de que su personal esté ocupado por personas travestis, transexuales y transgénero que reúnan las condiciones de idoneidad para el cargo, tal como detalla la norma.
“No sólo cumplimos con el piso que prevé la ley, sino que también proyectamos la incorporación de más trabajadores para seguir en una senda de inclusión, ya que la igualdad laboral es un derecho que decidimos hacer valer como prioritario”, aseguró Lorenzino.
En esa línea, el Defensor del Pueblo destacó la necesidad de que “exista un cambio cultural, para que en los distintos ámbitos estas personas sigan ganando reivindicaciones, las cuales estuvieron, y lamentablemente aun lo siguen estando, postergadas en muchos aspectos”.