El Defensor del Pueblo bonaerense alertó que el impacto de este aumento golpea con más fuerza a los sectores vulnerables. Créditos, tarjetas y financieras, bajo la lupa.
El Defensor del Pueblo bonaerense, Guido Lorenzino, alertó sobre el impacto de la suba de las tasas de interés, y aseguró que “el acceso al financiamiento destruye la economía familiar y golpea todavía más duro en los que menos tienen, que muchas veces se ven obligados a acudir a estas vías para pagar servicios o afrontar deudas”.
Esta postura tiene que ver con un informe elaborado por el organismo, que analizó el encarecimiento de los créditos personales, de las tarjetas de créditos y de las financieras, donde las tasas subieron significativamente en los últimos meses.
“Esta realidad se vuelve más compleja en un contexto de alta inflación y devaluación del peso, que provoca que en los sectores más vulnerables se profundicen las necesidades y se vean en la urgencia de financiarse para pagar los servicios públicos o productos esenciales para su subsistencia”, indicó Lorenzino.
El informe mostró que las familias que sacaron créditos personales sufrieron un aumento en las tasas del 46,75% en julio, con un incremento interanual del 22%. En lo que refiere a las tarjetas de crédito, desde mayo de 2017 a junio de 2018 los intereses ascienden a un pico de 44.64%.
En el caso de quienes accedieron a un préstamo con financieras, estas aplicaron una tasa nominal anual de entre el 45 y 99,99% que, sumado a los gastos administrativos y de otorgamiento, comisiones, etc., elevan la tasa de costo financiero total (CFT) más el IVA en el orden del 70.35 al 261,91% respectivamente, dependiendo el monto del préstamo, los plazos de devolución y las características.
Ante este panorama, Lorenzino planteó que “debido a estos altos valores sería recomendable no usar en exceso la tarjeta y principalmente no abonar el mínimo de los resúmenes, porque el costo de financiarse con tarjeta puede superar el 100% anual”.